El autismo es una condición neuroconductual compleja y no progresiva que afecta a las personas de diversas formas. Actúa como un obstáculo al afectar la comunicación verbal y no verbal y la interacción social. También conocido como trastorno del espectro, las personas con autismo enfrentan desafíos en las habilidades sociales, el comportamiento, así como problemas sensoriales y de atención que impactan negativamente en sus vidas. Tienen problemas para comprender los pensamientos y las emociones de otras personas, lo que les dificulta transmitir sus ideas a los demás con palabras o mediante el tacto, las expresiones faciales y los gestos. Sin embargo, al igual que cualquier otra persona, también poseen identidades, peculiaridades y preferencias únicas.
A mediados de los 90, una investigadora llamada Barbara Strickland especuló que realidad virtual (VR) podría ayudar a desarrollar habilidades de conciencia social entre personas con autismo. Aunque los estudios iniciales fueron prometedores, la realidad virtual era cara y los auriculares a menudo eran voluminosos e incómodos.
Tales problemas se convirtieron en un obstáculo para las terapias de realidad virtual y la adopción de la tecnología se detuvo. Recientemente, la tecnología de realidad virtual para el mejoramiento de los niños con autismo se ha convertido nuevamente en el foco principal de varios estudios. Exploremos cómo se puede utilizar esta tecnología para educar a los niños con autismo.
Papel de la realidad virtual
Los niños con autismo pueden comprometerse eficazmente con su entorno recurriendo a los servicios de Proveedores de formación en realidad virtual. Puede ayudar a mejorar el aprendizaje entre los niños y desarrollar el enfoque, ya que la realidad virtual tiene el potencial de permitir a los usuarios prestar mucha atención e interacción durante las sesiones.
El uso de la realidad virtual permite la exposición al mundo real para entrenar y desarrollar habilidades sociales en un entorno virtual controlado y seguro. La pantalla de montaje de cabeza de realidad virtual (VR-HMD) ha sido el enfoque principal de varios estudios que categorizados por diferencias en el tipo de aplicación, la tecnología y las características del participante.
Aunque hay esperanzas, el uso de la tecnología de realidad virtual debe pasar por más investigación para el sector educativo. Debe asegurarse que se puedan hacer las recomendaciones adecuadas sobre la implementación, el uso y la sostenibilidad de este concepto. A estudio por Didehbani (2016), Parsons & Cobb (2011) y Tzanavari (2015) afirman que existe evidencia que sugiere ensayar, individualizar y Repetir instancias sociales en diferentes contextos para la generalización de las habilidades sociales aprendidas en un entorno virtual a las interacciones de la vida cotidiana.
Con la realidad virtual, los niños con autismo pueden nutrirse y prepararse para hablar en público. Por ejemplo, la audiencia de avatares se puede utilizar para animar a los niños a mirar alrededor de la sala, y si no hacen contacto visual con la audiencia, los avatares se desvanecerán. Esto podría obtener una buena respuesta de los participantes y generar un sentido de confianza entre los niños.
El Centro de Salud Cerebral de la Universidad de Texas en Dallas y el Centro de Estudios Infantiles de la Universidad de Yale examinaron conjuntamente la forma en que el entrenamiento de realidad virtual afectaba los cerebros de los participantes. Anteriormente, Bain He.alth había realizado estudios iniciales sobre Realidad Virtual-Entrenamiento de Cognición Social (VR-SCT). Las personas que tienen autismo desarrollaron habilidades sociales como el reconocimiento emocional, y comenzaron a comprender y responder a los demás durante una conversación con el desarrollo de escenarios de realidad virtual. Fue Brain Health, quien en el año 2012, descubrió que la plataforma de realidad virtual es un mecanismo eficaz que ayuda a mejorar la cognición y las habilidades sociales entre las personas con autismo.
En conclusión
Aunque ha habido un desarrollo progresivo en torno a la realidad virtual para el autismo a lo largo de los años, un aumento El requisito de la investigación sobre la pantalla de montaje de la cabeza de realidad virtual para una mejor base teórica es necesario. Conocemos su uso para la evaluación y el aprendizaje de niños y adultos en el espectro del autismo. Esperamos ver más terapias de realidad virtual en escuelas, hogares y oficinas a medida que se desarrollen más programas de capacitación y se realicen estudios en profundidad.